Brecha digital
Brecha digital
BRECHA DIGITAL
Por tanto, la brecha digital separa a los que están conectados a la revolución digital de las TIC de los que no tienen acceso a estas. Esta se produce tanto a nivel internacional como dentro de la comunidad, ya que la gente queda a uno u otro lado de las barreras económicas y de conocimientos que esta supone.
El acceso a la tecnología está provocando una nueva brecha entre aquellos que tienen acceso a ella y los que no. Según los datos de uno de los informes de UNICEF, el 29% de los jóvenes no están conectados; la Sociedad Digital refleja brechas económicas, y además amplifica las oportunidades de los niños de entornos más favorecidos mientras que se reduce los de los más desfavorecidos. Asimismo, la brecha digital viene acompañada de una brecha de género en la que existe un 12% de hombres que utilizan más Internet que de mujeres.
Según afirma CEPAL (2003), “la brecha digital es la línea divisoria entre el grupo de población que ya tiene la posibilidad de beneficiarse de las TIC y el grupo que aún es incapaz de hacerlo. En otras palabras, es una línea que separa a las personas que ya se comunican y coordinan actividades mediante redes digitales de quienes aún no han alcanzado este estado avanzado de desarrollo”.
Según afirma CEPAL (2003), “la brecha digital es la línea divisoria entre el grupo de población que ya tiene la posibilidad de beneficiarse de las TIC y el grupo que aún es incapaz de hacerlo. En otras palabras, es una línea que separa a las personas que ya se comunican y coordinan actividades mediante redes digitales de quienes aún no han alcanzado este estado avanzado de desarrollo”.
Desde otra
perspectiva, la brecha digital también se define como la línea divisoria entre
la población de “ricos” y “pobres” en información. De esta forma, se identifica
también una brecha digital internacional, que separa a las regiones y a los
países; y una brecha digital doméstica, la cual divide a los grupos de
ciudadanos de una sociedad.
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Por tanto, la brecha digital separa a los que están conectados a la revolución digital de las TIC de los que no tienen acceso a estas. Esta se produce tanto a nivel internacional como dentro de la comunidad, ya que la gente queda a uno u otro lado de las barreras económicas y de conocimientos que esta supone.
El concepto de
brecha digital se ha ido modificando a lo largo del tiempo. En un principio
este se refería básicamente a los problemas de conectividad. Posteriormente, se
empieza a introducir la preocupación por el desarrollo de las capacidades y
habilidades necesarias para utilizar las TIC y actualmente también hace
referencia al uso de los recursos integrados en la tecnología. Por tanto, el
concepto de brecha digital incluye los enfoques de infraestructura,
capacitación y utilización de los recursos.
Basados en
estos elementos, muchos organismos internacionales han adoptado una política de
desarrollo cuyo objetivo principal es la reducción de la brecha digital. Sin
embargo, las inversiones de estas políticas se orientan principalmente en el
desarrollo de la conectividad, lo que resulta ser insuficiente para acabar con
esta brecha digital. En esta misma línea destacamos, que las mediciones de la
brecha digital están relacionadas con el grado de masificación del uso de las
TIC entre países, regiones, grupos o personas y se mide a través de variables
como la disponibilidad de aparatos tecnológicos.
BRECHA DIGITAL EDUCATIVA
Encontramos
una brecha digital como consecuencia de la formación y situación educativa de
las personas. El ciudadano del futuro no solo deberá estar alfabetizado con el
dominio lectoescritor, sino también debe interaccionar y comunicarse con las
nuevas tecnologías, pues estas serán las herramientas básicas de intercambio de
información en el siglo XXI.
Existe la expectativa
que la educación será la puerta de entrada al mundo de las tecnologías. En la
escuela los jóvenes, especialmente los provenientes de los sectores más pobres,
no solo tendrían sus primeros contactos con las TIC adquiriendo las habilidades
para su utilización y provecho, sino que además se han alimentado grandes
esperanzas en cuanto a que su uso en las estrategias de enseñanza e
implementación en el currículo mejoraría los resultados académicos, modernizaría
la gestión escolar y elevaría los niveles de calidad de la educación.
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Por tanto, a
nivel educativo Internet es una herramienta muy importante que nos permite un
intercambio constante de nuevos conocimientos que beneficia en gran medida a nuestra
sociedad. Este nos permite tener lo que necesitamos o deseamos de forma
instantánea. Por todo ello, es de gran importancia que los docentes utilicen
este recurso ya que les ayudará a mejorar su calidad de enseñanza. Nos
encontramos en una sociedad digitalizada que precisa la utilización de la
tecnología y por tanto reducir la brecha digital es un objetivo prioritario que
debemos de afrontar los docentes permitiendo en todos nuestros alumnos adquirir
una serie de habilidades que les permitan desenvolverse en este mundo digital,
para lo que resulta muy importante desarrollar la competencia digital de forma
transversal en todas nuestras clases.
APORTACIONES
A modo de
reflexión, he querido introducir un análisis de la competencia digital que
debemos de desarrollar todos los docentes. Para ello, es necesario conocerla y
saber cómo podemos trabajarla en clase.
La competencia
digital (CD) es aquella que implica el uso creativo, crítico y seguro de las
tecnologías de la información y la comunicación para alcanzar los objetivos
relacionados con el trabajo, el aprendizaje, el uso del tiempo libre, la
inclusión y la participación en la sociedad.
Es necesario
desarrollar diversas destrezas relacionadas con el acceso a la información, el
procesamiento y uso para la comunicación, la creación de contenidos, la
seguridad y la resolución de problemas, en los distintos contextos que se nos
pueden presentar. Por tanto, el alumno ha de ser capaz de hacer un uso habitual
de los recursos tecnológicos disponibles para resolver problemas y alcanzar los
objetivos propuestos.
La adquisición
de esta competencia también integra el desarrollo de algunas actitudes y
valores que permitan al educando adaptarse a las nuevas necesidades
establecidas por la sociedad digital. Han de desarrollar una actitud activa,
crítica y realista hacia las tecnologías respetando los principios éticos en su
uso.
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Una vez que
conocemos qué es la competencia digital y cuáles son sus fines educativos,
conviene conocer algunos recursos para llevar a cabo en el aula y de forma
transversal contribuir a que esta se desarrolle de forma óptima. Destaco a
continuación una lista con alguno de ellos:
-
Mapas conceptuales: los alumnos a través de la
aplicación “CmapsTools” pueden elaborar su propio mapa conceptual con los
contenidos de la unidad didáctica en cuestión.
-
WebClue: es una actividad web en la que los
alumnos tiene que descubrir, mediante pistas, la identidad de un personaje secreto.
A través de esta actividad trabajaremos la búsqueda y selección de información.
-
Juegos MMO (Massively Multiplayer Online):
permiten desarrollar el análisis estratégico, la resolución de problemas, toma
de decisiones, la cooperación y colaboración y la comunicación a través de
Internet.
-
Líneas del tiempo con la aplicación Dipity all the Time: esta herramienta
permite crear una línea del tiempo muy atractiva sobre algún hecho que estemos
estudiando e insertar audio, vídeos, enlaces y mapas de Google Maps.
Estos son
algunos de los muchos recursos que tenemos los docentes para trabajar y
fomentar en clase la competencia digital.
A modo de
conclusión, destaco que las brechas digitales son motivos de exclusión de la
sociedad a través de una marginación social y personal. Como señala la UNESCO
(2005, 36-37): “Reducir la brecha digital es un objetivo prioritario si queremos
que las nuevas tecnologías contribuyan al desarrollo y propicien el surgimiento
de auténticas sociedades del conocimiento.” Esta reducción de la brecha digital
constituye un desafío para nuestra sociedad y que, a través de instituciones
públicas, como es la escuela, podemos evitar el aumento de la misma
contribuyendo en el proceso de desarrollo tecnológico de nuestros alumnos.
BIBLIOGRAFÍA Y WEBGRAFÍA
Cabero
Almenara, J. (2014). Reflexiones sobre la brecha digital y la educación: siguiendo
el debate. Inmanencia: Revista del Hospital Interzonal General de
Agudos (HIGA) Eva Perón, 4 (2), 14-26.
Educacionyfp.gob.es.
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Garcés, C. R.
(2008). La brecha digital en la escuela: factores que inciden en el
acceso a las TIC en el espacio educativo (Doctoral dissertation,
Universitat de Barcelona).
Josechuferreras.files.wordpress.com. (2019). [online] Recuperado
de: https://josechuferreras.files.wordpress.com/2012/09/actividades_para_desarrollar_la_competencia_di.pdf
Tello, E.
(2007). Las tecnologías de la información y comunicaciones (TIC) y la brecha
digital: su impacto en la sociedad de México. International Journal of
Educational Technology in Higher Education (ETHE), 4(2).
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